Este hotel urbano de 38 habitaciones lleva el nombre del árbol de Bodhi, sinónimo de una rara experiencia de aislamiento que lleva a la iluminación y se aleja del bullicio del mundo exterior. El alojamiento pretende ser un paraíso de absoluta relajación y rejuvenecimiento que le rescate del estrés al que tiende la vida diaria. Todas las habitaciones disponen de su propio balcón y ofrecen una vista inigualable del patio central con su jardín tropical meticulosamente estilizado y las cascadas. A primera vista el hotel presenta una distinguida mezcla del entorno marcado por la arquitectura del norte de Tailandia y la influencia china, que se combinan sutilmente. El hotel se empeña fervorosamente en proporcionarle un experiencia exclusiva de vacaciones y en ofrecerle lo esencial de un hotel boutique, como la piscina al aire libre para niños y adultos y la sala de conferencias para reuniones o encuentros privados. Será recibido en el vestíbulo con servicio de salida y recepción 24 horas y, además, este establecimiento con aire acondicionado dispone de caja fuerte, servicio de cambio de divisas, ascensor, cafetería, restaurante, conexión a Internet WiFi de pago, servicio de habitaciones y de lavandería, así como aparcamiento.